UGT señala que era necesario dar este paso ya que Aragón en estos momentos se encuentra entre las comunidades con peores condiciones laborales del todo el país.
Tras seis años de reivindicaciones para poder mejorar las condiciones laborales de las trabajadoras y trabajadores del Sector de Protección y Reforma de Menores en Aragón finalmente se ha iniciado la negociación con las patronales mayoritarias del sector.
Han procedido a constituir la mesa negociadora, lo que asegura un primer paso esencial para llegar a tener un convenio colectivo propio que pueda recoger las necesidades específicas del sector en Aragón.
«Hemos dado un paso decisivo con las patronales del sector que agrupan una clara mayoría para poder negociar y cambiar la situación actual. El Gobierno de Aragón debe cumplir con los compromisos dados para acabar con la situación actual que ha llevado a trabajadoras y trabajadores al límite de la precariedad laboral«, indica Angélica Mazo de UGT.
Salarios, jornada y permisos va a ser las claves para poder dignificar el sector.
Según han indicado los sindicatos, este sector laboral requiere de una alta cualificación y experiencia, en el que se ha intentado durante los últimos años «invisibilizar» la profesión del Educador y Educadora Social, «con el único objetivo de abaratar los costes económicos, consiguiendo que el sector de reforma y protección de menores perciba los salarios más bajos del ámbito social», han apuntado.
«Han soportado una pérdida económica del 50% del salario desde el 2003 año en que se iniciaron las externalizaciones de este servicio público. Hoy en día, resulta difícil encontrar profesionales cualificados y con la experiencia suficiente, dispuestos a desempeñar una labor que implica un alto desgaste emocional, en el que a menudo sufrimos agresiones físicas y verbales», han apuntado los colectivos.