Gemma Ramón subraya que este reconocimiento pasa por mejorar tanto los salarios de las trabajadoras como sus condiciones laborales
La Responsable del Departamento de Servicios Sociales de UGT, Gemma Ramón, ha participado en unas jornadas sobre envejecimiento activo organizadas por UGT-Galicia donde ha analizado la situación del sistema de dependencia.
Gemma Ramón ha recordado que la experiencia vivida durante la pandemia ha puesto de manifiesto “el riesgo que supone un deficiente funcionamiento del sistema de servicios sociales, principalmente en lo que atañe al sistema de cuidados, una situación que tuvo especial impacto en nuestros mayores por su vulnerabilidad”.
“En España disponen de servicio de atención o cuidados a domicilio, en torno a 550.000 personas, que dejaron de recibir estos servicios por el cierre. Personas que necesitaron más que nunca los apoyos de los servicios sociales domiciliarios” ha señalado, “por eso, es imprescindible configurar el 4º Pilar del Estado de Bienestar y desarrollar unos servicios sociales suficientes, públicos, y de calidad atendidos por profesionales que garanticen una cobertura universal y sean capaces de ofrecer una respuesta eficaz a los retos sociales, demográficos y económicos”.
Ramón ha subrayado que “resulta paradójico que haya sido la pandemia la que haya puesto en el candelero la necesidad de reforzar el Sistema de dependencia, -restituir el sistema que truncó el decretazo de 2012-, y sobretodo, que hayamos tenido que vivir miles de muertes en residencias, para poner en entredicho, no sólo el sistema sino los cuidados que se dispensan y las condiciones laborales de las trabajadoras”.
La Responsable del Departamento de Servicios Sociales ha manifestado que para UGT “debe prevalecer la prestación de servicios sobre la prestación económica, que se debe continuar la profesionalización del sector, tanto las gerocultoras en las residencias, como las auxiliares de Ayuda a Domicilio y se debe reconocer socialmente el valor de la actividad de cuidar, y este reconocimiento pasa por mejorar tanto los salarios de las trabajadoras como sus condiciones laborales”.
Inversión y coordinación
“El sindicato apuesta por la gestión pública y por una financiación finalista como corresponde a un derecho universal reconocido en la normativa legal, y que es preciso aumentar el porcentaje de PIB que se invierte en el sector de la dependencia, mejorar las ratios y que haya coordinación entre los servicios de salud y los servicios sociales” ha incidido.
“Hay que reforzar la sanidad pública, la Inspección de los servicios sociales, intensificar los servicios y establecer la complementariedad de los mismos de cara a obtener una atención integral, aumentar ampliamente el servicio de ayuda a domicilio, implementar la teleasistencia y aprovechar todo lo que ofrecen las nuevas tecnologías, y potenciar los centros de día, sin olvidar las ayudas técnicas”.
“Por ello urge incrementar la financiación en políticas sociales y acabar con la falta de inversión pública en prestaciones y servicios de atención, ya que los recortes presupuestarios derivados de anteriores crisis, han tenido como consecuencia la reducción de la intensidad de los servicios y de la calidad de los mismos” ha finalizado.